La Universitat Jaume I promoverá un programa de prácticas en ámbito rural
ALTO MIJARES | La Diputación de Castellón y la UJI
reforzarán su colaboración para combatir la despoblación a través de programas
formativos
La lucha contra la
despoblación y la defensa de una nueva ruralidad son dos de los objetivos que
unen a la Diputación de Castellón y la Universitat Jaume I, que ya trabajan
para reforzar el trabajo común que mantienen desde hace años y buscar nuevos
caminos que permitan dar un servicio tanto a los estudiantes como a los
municipios de interior.
Son algunos de los
aspectos analizados este viernes en la reunión mantenida en la UJI entre el
presidente de la Diputación, José Martí, y la rectora, Eva Alcón, encuentro en
el que han participado la diputada de Cultura, Ruth Sanz; las vicerrectoras de
Cultura y Relaciones Internacionales, Carmen Lázaro, y de Estudiantado y
Compromiso Social, Inmaculada Rodríguez, y el vicerrector de Planificación,
Coordinación y Comunicación, Modesto Fabra.
José Martí ha hecho
hincapié en el nuevo modelo de diputación, que está impulsando desde la puesta
en marcha de la nueva corporación política, donde la batalla contra la
despoblación “es para nosotros fundamental”. Para Martí, “es necesario trabajar
con fuerza en el cambio necesario de la mentalidad sobre lo rural”, insistiendo
en que hay que defender lo que ya funciona, pero avanzar en nuevos caminos para
que la nueva ruralidad, que es sinónimo de naturaleza, calidad de vida y
bienestar social, esté presente en nuestras vidas”. Y en este planteamiento,
para el presidente de la diputación “es fundamental trabajar de la mano con la
Universitat Jaume I, que hace una labor extraordinaria para formar a los
estudiantes y acercarles las oportunidades de desarrollo personal y profesional
que les ofrecen, no solo los municipios más grandes del litoral, sino los del
interior de la provincia”.
La rectora de la UJI,
por su parte, ha abierto las puertas de la universidad a seguir buscando nuevas
herramientas que permitan el trabajo conjunto entre ambas instituciones,
destacando la buena salud que tiene esta colaboración. De hecho, entre ambos ya
se están analizando nuevas posibilidades para promover políticas de desarrollo
rural y luchar contra la despoblación de los núcleos con menos de 3.000
habitantes, que supondría promover un programa de prácticas en el ámbito rural,
algo que ya se está aplicando con éxito en otras comunidades autónomas.
Para José Martí, “es
importante dar servicios a los jóvenes para que vean que en los pueblos también
pueden desarrollarse profesionalmente y pueden encontrar un camino para
quedarse a vivir en ellos”. Por ello, considera positivo analizar al detalle
las propuestas vinculadas con la ruralidad que llegan desde el ámbito
universitario.
La Diputación y la UJI
trabajan de la mano en diversos ámbitos, programas que en conjunto suman una
aportación de la institución provincial que ronda los 160.000 euros. Por un
lado está el convenio para financiar actividades culturales, cifrado en 110.000
euros, donde destaca sobre todo el Programa de Extensión Universitaria (PEU),
en el que la diputación participa de forma activa. Junto a ello, está en marcha
la Càtedra Diputación de Centros Históricos e Itinerarios Culturales, destinado
a financiar el proyecto Camins de Penyagolosa, que cuenta con una partida de
44.000 euros. Finalmente aparece el convenio con la Fundación Universitat
Empresa, dotado con 6.000 euros.
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